¿Qué lleva a alguien a cometer violencia extrema y convertirse en un asesino en serie? Los expertos han estudiado los perfiles criminales y la criminología forense para entender las motivaciones psicológicas y trastornos de la personalidad de estos individuos.
Los asesinos en serie suelen tener características psicológicas en común. Por ejemplo, la psicopatía, falta de empatía y remordimiento, y desórdenes mentales. También pueden tener un pasado de traumas y abusos infantiles, y familias disfuncionales que influyen en su comportamiento antisocial.
No todos los psicópatas son asesinos en serie, pero hay una conexión entre ellos. Los impulsos sexuales y la excitación se mezclan con el sadismo. Esto lleva a fantasías violentas que pueden convertirse en necesidad de cometer crímenes.
En este artículo, vamos a profundizar en la psicología detrás de un asesino en serie. Veremos los trastornos, motivaciones y factores que los llevan a cometer crímenes atroces.
Trastornos de personalidad y desórdenes mentales en los asesinos seriales
Los asesinos en serie son un misterio para todos. La psicología intenta entender qué les lleva a cometer crímenes horribles. En Suecia, el 90% de los homicidas tenía trastornos mentales. El 47% abusaba de drogas y el 54% tenía un trastorno de personalidad.
Psicopatía: la falta de empatía y remordimiento
La psicopatía es muy común entre los asesinos en serie. Los psicópatas no sienten empatía ni remordimiento. Veían a las personas como objetos para usar según sus deseos, sin importarles el dolor que causaban.
Un ejemplo es Luka Magnotta, conocido como «el descuartizador canadiense». Fue condenado por asesinar, descuartizar y canibalizar a alguien.
Trastorno antisocial de la personalidad: el desprecio por las normas sociales
El trastorno antisocial de la personalidad también es común entre los asesinos seriales. Estas personas no respetan las normas y no se sienten culpables de sus acciones. Los hombres son más agresivos que las mujeres, con un 44.1% de agresividad.
Un estudio con policías encontró que el 29% tenía trastorno disocial. Eran más antisociales y agresivos que los controles.
Esquizofrenia y otros trastornos psicóticos en algunos casos extremos
No todos los asesinos en serie tienen enfermedades mentales graves. Pero en casos extremos, pueden tener esquizofrenia o otros trastornos psicóticos. Estos trastornos causan delirios y alucinaciones, llevando a actos violentos.
Un ejemplo es Nicolas Claux, un caníbal necrófilo condenado por asesinato y robos de tumbas.
La infancia difícil y los ambientes negativos influyen en el desarrollo de asesinos en serie. También hay una posible influencia genética. – César Alcalá
No todos los asesinos en serie tienen trastornos mentales claros. Pero la combinación de factores psicológicos, ambientales y posiblemente genéticos puede llevar a un comportamiento violento y despiadado.
Motivaciones psicológicas y factores desencadenantes
Las motivaciones psicológicas de los asesinos en serie son complejas. A menudo, están relacionadas con experiencias traumáticas de la infancia. Abusos físicos, emocionales o sexuales pueden ser el detonante para su comportamiento criminal.
Estos traumas pueden dejar cicatrices profundas en la psique. Contribuyen al desarrollo de fantasías violentas y sádicas. Con el tiempo, estas fantasías pueden intensificarse y volverse más elaboradas.
Los asesinos en serie pueden obsesionarse con estas fantasías. Reviven constantemente en su mente y, en algunos casos, las llevan a cabo. Esto puede llevar a comportamientos como el acecho o la agresión sexual.
Los eventos estresantes también pueden desencadenar los asesinatos. Pueden ser pérdidas significativas, como la muerte de un ser querido. O rechazos y humillaciones que afectan su autoestima.
Enfrentándose a estos eventos, los asesinos en serie pueden buscar poder y control a través de la violencia. Es importante recordar que no todos con traumas o eventos estresantes se convierten en asesinos en serie. Pero para algunos, estos factores pueden llevarles a un comportamiento criminal extremo.